
¿Está el Feedback quedando atrás?
¿Y si dejaras de mirar por el retrovisor? Durante años, las organizaciones han confiado en el feedback como su brújula para el desarrollo de talento. Revisiones de desempeño, retroalimentaciones 360°, reuniones uno a uno… todo giraba en torno a analizar lo que ya pasó. Como si crecer fuera solo cuestión de corregir lo que estuvo mal, centrándose en los momentos más negativos, más lo que se hizo bien. Siempre con una mirada del pasado y pocas veces pensando en el futuro. Pero algo está cambiando. En medio de un mundo que avanza rápido y exige agilidad, mirar hacia atrás ya no es suficiente. Hoy empieza a abrirse paso una nueva forma de acompañar a las personas: el feedforward. Un enfoque que en lugar de preguntar “¿qué hiciste mal?”, se atreve a decir “¿qué podrías hacer mejor?”, o tomando tus fortalezas, ¿qué puedes hacer mejor? ¿Estamos dejando atrás el feedback tradicional? ¿O estamos evolucionando hacia una forma más poderosa de impulsar el talento? La respuesta es ambas. Feedback vs. Feedforward: ¿Pasado o futuro? Imagina que alguien te dice: “En tu última presentación cometiste varios errores en los datos. Eso confundió a todos.” Automáticamente, tu mente viaja al pasado. Te revives explicando las cifras, ves caras de duda, sientes ese nudo en el estómago. Eso es feedback. Una mirada al retrovisor con la intención de aprender del error. Ahora imagina que, en cambio, te dicen: “Para tus próximas presentaciones, podrías revisar los datos con alguien más antes de mostrarlos. Eso te daría más seguridad.” Aquí, la conversación cambia de dirección. Ya no se trata de lo que hiciste mal, sino de lo que puedes hacer mejor. Eso es feedforward. Una invitación a mirar hacia adelante con propósito, ya tu mente viaja a un camino de posibilidades que se abren. Marshall Goldsmith, uno de los referentes en liderazgo que impulsó este enfoque, lo explica de forma simple y poderosa: el feedforward ayuda a las personas a enfocarse en soluciones, no en culpas; en posibilidades, no en errores. Y en un mundo donde el cambio es constante, ¿no tiene más sentido mirar hacia donde vamos que quedarnos atrapados en lo que ya pasó? ¿Se reemplazan o se complementan? Feedforward y feedback en la gestión del desempeño No se trata de elegir entre uno u otro. En realidad, feedback y feedforward son dos caras de la misma moneda: el desarrollo del talento. Y en una gestión del desempeño más moderna, pueden —y deben— convivir. ¿La clave? Saber cuándo usar cada uno y para qué. 📍 Feedback: conciencia, evaluación y cierre El feedback tiene su fuerza en el presente mirando al pasado. Nos ayuda a cerrar ciclos, revisar resultados y tomar conciencia del impacto que nuestras acciones ya tuvieron. Cuando aplicarlo: ¿Su propósito? 🔭 Feedforward: desarrollo, foco en el futuro y crecimiento El feedforward cambia el ángulo. En vez de señalar lo que fue, abre la conversación sobre lo que puede ser. Es ideal para construir, no solo corregir. Cuándo aplicarlo: ¿Su propósito? ¿Qué estrategias podrías implementar el próximo trimestre para asegurar entregas a tiempo? ¿Qué te ayudaría a lograrlo?, te puede ayudar pensar si quieres en tus experiencias pasadas para pensar en estas estrategias. En resumen, el feedback reconoce el camino recorrido; el feedforward, ilumina el que viene. Usados con intención, pueden ser una poderosa dupla para potenciar el desarrollo humano en las organizaciones. Ventajas del Feedforward ¿Por qué este enfoque está ganando terreno? ¿Te cuesta recibir feedback sin sentirte atacado? El feedforward evita la culpa y reduce la resistencia emocional. ¿Quieres enfocarte en lo que sí puedes cambiar? Promueve la acción, mirando hacia adelante en lugar de revisar el pasado. ¿Y si las conversaciones fueran más colaborativas que evaluativas? Invita al diálogo constructivo y funciona en todos los niveles de la organización. Límites del Feedforward ¿Qué deberíamos tener en cuenta? ¿Se puede avanzar sin mirar atrás? Si no se reconoce el pasado, puede parecer evasivo o superficial. ¿El feedforward reemplaza la responsabilidad? Si se usa para evitar conversaciones difíciles, pierde su valor. ¿Está tu equipo preparado para este tipo de conversaciones? Requiere madurez, práctica y un entorno de confianza. ¿Entonces… el feedback ha muerto? No. Pero está madurando hacia una nueva forma de conversación. En entornos ágiles, humanos y en constante transformación, el feedback tradicional ya no alcanza. Hoy se está transformando en algo más vivo, más útil, más conectado con el desarrollo real de las personas. La clave no es reemplazar, sino integrar: ¿Y cómo se aplica en la vida real? Este giro —del feedback al feedforward— no es una moda. Es el reflejo de un cambio cultural más profundo: pasar de evaluar personas a desarrollar su talento. Porque la pregunta clave ya no es solo: “¿Cómo lo hiciste?”, si no también: “¿Cómo podrías hacerlo aún mejor la próxima vez?” En Kite Group Chile acompañamos a líderes y equipos a transformar sus conversaciones para generar impacto real. Diseñamos programas de desarrollo, mentoring y liderazgo donde el feedback y el feedforward se integran como herramientas clave para el crecimiento. Si quieres llevar tu cultura organizacional al siguiente nivel, conversemos seguro que desde nuestra mirada hay algo en lo que podemos aportarte.